Hablemos de cuerpos y la obra de arte que sigue siendo el tuyo a pesar de las caricias que te han dado mis manos con intenciones de desgastarte para que no seas tentación a otros ojos que no sean los míos. Hablemos de tu cadera y el movimiento rápido-lento -no me vaya a correr- que provocas encima mía, contra la pared, debajo, a cuatro patas.... Hablemos de la compaginación que tienen nuestros cuerpos desnudos y la poesía que escribes en mi cara con tu semen. Hablemos de lo encantada y relajada que me dejas después de un buen polvo, de esos con tensión por si papá se despierta con los gemidos de su hija y sales a patadas con los calzoncillos a medio poner. Hablemos, mejor hablemos entre gemidos porque no hay mejor forma de entendernos.
-Silvia López (@consdesilvita)
No hay comentarios:
Publicar un comentario